Su envase original cerrado está pensado para que el producto se conserve en óptimas condiciones de uso por un mínimo de un año, teniendo en cuenta ideales condiciones de:
¿QUÉ TENER EN CUENTA?
- Mantener la harina alejada de fuentes de calor.
- La heladera o el freezer es el mejor lugar para conservarla por largos períodos.
- Si la temperatura ambiente supera los 24º C y la humedad es mayor al 60% durante más de cinco días, se cumplen las condiciones propicias para que comience el ciclo de desarrollo de algunas plagas naturales del trigo tales como: carcomas, gorgojos y palomillas del trigo.
- Al almacenar la harina en la heladera debemos asegurarnos que la diferencia de temperatura entre el centro y la superficie sea mínima, para evitar condensaciones y que se transforman en grumos.
- Es una excelente idea tamizarla sobre una superficie amplia. De esa manera vamos a homogeneizar la temperatura, airear y mejorar el contenido de humedad para una correcta conservación.
- El porcentaje de humedad que contiene la harina varía de 10% a 14,5% Max. (establecido por el CAA) según tipo de molienda. Cuando se supera el 15% puede provocar cambios en sus condiciones organolépticas, como también variaciones en su reología.
- Una vez abierto el paquete, es recomendable almacenar el contenido, lejos de fuente de calor, en un lugar seco y fresco o en la heladera en un recipiente hermético